La Producción del Lenguaje

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INTRODUCCIÓN

La capacidad de hablar es una características distintiva y enigmática de la especie humana. Pese a ello, y a que el análisis de los principios que rigen el habla constituyen un componente esencial de la actividad lingüísticas, la producción del lenguaje ha sido un proceso poco conocido.
La razón está en la dificultad de la utilización de métodos experimentales. Así, el investigador aborda un proceso que sólo es observable en la última fase. No puede controlar variables de influencia en el input (ideas, creencias, etc.), ni restringir tipos de respuesta al sujeto, sin limitar la validez de sus conclusiones. En cualquier caso sí se dispone de un output (la cadena de sonidos que constituyen el habla) que sí es observable y medible.

CARACTERIZACIÓN DE LOS TRES TIPOS DE PROCESOS QUE INTERVIENEN EN LA PRODUCCIÓN DEL LENGUAJE

Psicológico/cognitivos: (facultades mentales horizontales)
Durante la actividad del habla los sujetos deben seleccionar el contenido de sus mensajes a partir de representaciones activadas en su memoria, es decir, procesos atencionales, motivacionales y mnésicos de índole general e inespecífica de dominio. Al mismo tiempo la selección de una representación como contenido de un mensaje lingüístico implica realizar ciertas operaciones mentales sobre la representación.

Lingüísticos/gramaticales:
Cuando los sujetos se comunican a través del lenguaje, utilizan combinaciones de signos lingüísticos que pueden ser interpretados por sus interlocutores, es decir, construyen oraciones significativas y gramaticalmente aceptables y no series aleatorias de palabras.

Comunicativo/instrumentales:
El habla también es una actividad instrumental, pues los sujetos emiten las formas lingüísticas que consideran más eficaces en cada momento de interacción social o proceso comunicativo, con repercusiones sociales, que se ve influido por factores pragmáticos tales como los objetivos comunicativos e intencionales del hablante, el contexto social donde ocurre, el conocimiento de los interlocutores sobre sí mismo, etc.

Fases o etapas genéricas de la producción del lenguaje. Caracterización de cada una. El modelo de Levelt:
Levelt propone un modelo cognitivo del proceso de producción. Según él se distinguen tres fases o componentes de procesamiento
  1. Fase de planificación o conceptualización: los sujetos seleccionan el contenido comunicativo de su mensaje. Se trata de actividades de carácter intencional, aunque no necesariamente consciente. El resultado es la elaboración de un paquete de información llamado mensaje prelingüístico. Esta fase ocurre en el conceptualizador.
  2. Fase de codificación lingüística o de formulación: el mensaje prelingüístico es traducido a un formato lingüístico. Implica el uso de una lengua y una gramática. Requiere la especificación progresiva de las unidades estructurales (sintagmas, palabras, etc.) que intervendrán en la locución hasta configurar el plan fonético o representación de la serie ordenada de unidades lingüísticas que componen la oración. El resultado de esta fase es el plan fonético o habla interna.
  3. Procesos periféricos o articulación: no es necesaria para el lenguaje interno. Las representaciones lingüísticas que configuran el plan fonético son traducidas a un código o plan motor que pone en marcha la secuencia de movimientos de las estructuras musculares implicadas en la producción del lenguaje. A la ejecución motora de dicho actos se llama producción del habla.
El modelo también contempla un circuito de retroalimentación a través del sistema de comprensión del habla, que influye en el conceptualizador. La retroalimentación puede surgir a partir del plan fonético o habla interna, y desde el habla manifiesta, entrando en juego los sistemas de audición.

Diferencia entre producción del lenguaje y producción del habla:
La producción del habla hace referencia a la ejecución del plan motor o secuencia de movimientos de las estructuras musculares implicadas en la articulación de los sonidos, mientras que la producción del lenguaje implica la producción del habla, más las fases de conceptualización y de formulación.

Alternativas para abordar la producción del lenguaje por parte de una teoría psicolingüística:
Enfoque funcionalista:
  1. El habla es un acto intencional e instrumental que implica elementos extralingüísticos tales como el emisor y sus actitudes proposicionales o el contenido referencial de sus mensajes.
  2. Asume que la explicación psicológica del habla debe incluir un análisis de los procesos de codificación lingüística de los mensajes y otro de los procesos previos más centrales de conceptualización.
  3. Se parte del supuesto de que los factores no lingüísticos (saliencia perceptiva, relevancia comunicativa, etc.) pueden influir en los procesos de codificación modificando ciertos aspectos de la forma lingüísticas de los mensajes.
Enfoque formalista:
  1. La formulación de los mensajes se lleva a cabo mediante procesos computacionales independientes de los implicados en la decisión intencional de realizar un acto de habla.
  2. La explicación psicológica del habla debe quedar limitada a la definición de las operaciones formales específicas que el sistema realiza para construir los mensajes, es decir, las operaciones que implican la utilización de información gramatical.
  3. Se parte del supuesto de que los procesos de producción de oraciones son idénticos, tanto si son verdaderos como falsos, eficaces o no, pues su funcionamiento sigue un curso invariante sólo determinado por la gramática.
Tradición psicológica versus lingüística:
La tradición psicológica corresponde al enfoque funcionalista, y la lingüística al formalista.

Criterios de estructuración de este campo en modelos que abordan separadamente la producción de oraciones y la de textos y discursos:
Desde los años 60, debido al desarrollo de la lingüística contextual, del interés por el análisis de unidades más molares de representación y de las técnicas de simulación por ordenador, se produjo un giro hacia el estudio de la producción de discursos (secuencias multioracionales).
Los modelos de producción del discurso se basan en el supuesto de que la necesidad de encadenar oraciones en un discurso comporta operaciones y tipos de información que en ningún caso quedan recogidos en un modelo de producción de oraciones. Utilizan la simulación por ordenador como método que les aproxima más a los estudios de inteligencia artificial que a la Psicología Experimental.
Debido a la influencia de Chomsky, en la actualidad los estudios se centran en la producción de oraciones individuales, en las respuestas independientes del contexto que parecen las más adecuadas en la elaboración de modelos de arquitectura funcional del procesamiento del lenguaje.
En la producción de oraciones, que se emita una sola oración o un conjunto de ellas encadenadas en un discurso no modifica la naturaleza de las operaciones implicadas en la construcción de las oraciones individuales y encajan mejor en la utilización de métodos observacionales y experimentales.

PLANIFICACIÓN CONCEPTUAL DE LOS MENSAJES

Procesos de macroplanificación y microplanificación de mensajes:
El resultado final de la ejecución coordinada de los procesos de macro y microplanificación es la representación denominada mensaje preverbal de la oración, representación que corresponde, en su formulación lingüística, a la representación de la estructura profunda de la gramática generativa.
Procesos de macroplanificación:
  1. Incluyen procesos de planificación del discurso global.
  2. Son responsables de la selección de los contenidos y estructura globales de los discursos y del estilo retórico, así como de la definición de los contenidos semánticos y pragmáticos de los grupos de enunciados individuales del discurso y de su orden relativo en la secuencia lineal de éste.
  3. También otros procesos que afectan a la elaboración de representaciones de los enunciados individuales del discurso, como aquellos implicados en la selección del contenido informativo básico de los enunciados y los procesos responsables de la selección y puesta en relación de los predicados y argumentos (especificación de la estructura temática del mensaje).
Procesos de microplanificación:
Se aplican de forma directa a la construcción de enunciados individuales, serían responsables de perfilar las decisiones estructurales concretas que se derivan de las decisiones anteriores. Así, son ejemplos de estos procesos la forma lingüística específica de presentación de los referentes de la oración, la perspectiva con que los distintos núcleos temáticos deben ser presentados, la posición de piezas léxicas en la oración (linealización) y el tiempo y modo verbales.

Concepto de marcadores de entrada (I-marker):
Son representaciones de unidades protoverbales de elementos y relaciones entre elementos, que contienen información conceptual sin ser aún palabras, aunque sí contienen información específica sobre cómo han de construirse los enunciados lingüísticos, por ello se distinguen nociones pre-teóricas más generales y abstractas como las de significados o intención del mensaje.
Los Input-markes, junto a reglas gramaticales (de relación, de concordancia, de entonación, fonológicas) forman el modelo de Schlesinger.
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